En 1988, con un equipo integrado en su mayoría por jugadores del club y de la región, Sportivo Belgrano se quedó con los dos campeonatos que jugó: el Oficial de la Liga Cordobesa y el Provincial de la Asociación Cordobesa, en el cual dio la vuelta olímpica el 30 de diciembre de ese año.
El día en que Sportivo le ganó al subcampeón argentino
En abril de 1978, la "verde" edificó uno de los triunfos más importantes que haya obtenido en su periplo por la Liga Cordobesa: venció como local a Talleres -podría haberlo goleado- que tres meses atrás había perdido la final del Torneo Nacional con Independiente y que, en sus filas, tenía una constelación de estrellas.
Historia - Fútbol03/04/2022Leandro GottardiDomingo 30 de abril de 1978, tarde de fútbol en barrio Alberione. Una expectativa inmensa envolvía a los hinchas de Sportivo Belgrano puesto que el elenco local recibía, ni más ni menos, que al último subcampeón del fútbol argentino: Talleres, que tres meses antes había perdido una histórica e increíble final del Torneo Nacional 1977 ante Independiente de Avellaneda.
La "verde", que había comenzado su temporada en la Liga Cordobesa con tres derrotas, venía enfilando una clara levantada con tres triunfos consecutivos. Enfrente, la "T", una escuadra plagada de estrellas que aún masticaba el amargo sabor de la derrota -empate en realidad ante el "Rojo", que lo había privado de ser campeón argentino- pero que se encontraba en la cúspide futbolística de su historia.
Si bien a San Francisco Talleres no pudo llegar con Luis Galván, Miguel Oviedo y Daniel Valencia, afectados a los entrenamientos de la Selección argentina que se preparaba para el mundial que a la postre ganaría con estos futbolistas como protagonistas, sí lo hizo con otros jugadores reconocidos a nivel nacional como Ocaño, Reinaldi, Ludueña y Bocanelli. Además también estaban Víctor Binello, que había llegado a la "T" años atrás desde Sportivo y el arquero Rubén Guibaudo, que luego atajaría en la "verde".
El 2-0 -goles de Eduardo Chávez y Héctor Garay- con el que la escuadra de nuestra ciudad superó a los cordobeses, según cuentan las crónicas de la fecha, fue un resultado corto y de no haber sido por la figura del propio Guibaudo, podría haber alcanzado una cifra categórica. Alberione vivió una verdadera fiesta.
La previa
De cara al choque ante Talleres, San Francisco estaba revolucionado. Es que Sportivo acumulaba tres victorias consecutivas y recibía a uno de los dos líderes de la Zona A del Apertura de la Liga Cordobesa, junto a Instituto. Además, la "T" era el subcampeón del fútbol argentino, puesto que meses atrás, más precisamente el 25 de enero de 1978, había perdido la final del Torneo Nacional 1977 ante Independiente.
En Córdoba, ganando 2-1 y con tres hombres de más, Talleres no pudo aguantar, el "Rojo" lo empató a través de Ricardo Bochini y por goles de visitante -la ida había sido 1-1- se alzó con el título.
En aquella jornada de enero, la "T" había alistado a: Guibaudo; Astudillo, Luis Galván, Binello y Ocaño; Reinaldi, Ludueña y Valencia; Bocanelli, Bravo y Cherini.
A su vez, en San Francisco, el 30 de abril de ese mismo año, alistó a: Guibaudo; Astudillo, Arrieta, Binello y Ocaño; Ludueña, Ossés y Reinaldi; Bocanelli, Britapaja y Díaz.
Es decir, repitió a 7 de los 11 jugadores que habían saltado desde el inicio en busca del título nacional ante Independiente. Valencia y Luis Galván, quienes estaban con la Selección, no estuvieron en nuestra ciudad.
Ante los pergaminos expuestos por el rival, barrio Alberione explotó y vivió una jornada para la posteridad.
De cara al enfrentamiento en sí, Sportivo acumulaba tres victorias consecutivas mientras que su rival venía de ganarle el clásico a Belgrano, por 2-1.
"Los halagos últimos (para Sportivo) llegaron como consecuencia del buen comportamiento de la extrema defensa y del olfato del gol que ahora denuncian sus delanteros netos y donde, obviamente, la presencia del santafesino Rito Fernández viene acaparando los comentarios más elogiosos", publicaba en la previa La Voz de San Justo.
Y agregaba que "Talleres, pese a las ausencias de Galván y Valencia al estar afectados al plantel nacional que se viene preparando para el Campeonato Mundial de Fútbol, sigue siendo toda una constelación de estrellas ya que valores de méritos reconocidos como Ludueña, Reinaldi, Bocanelli, Ossés, Ocaño y Cabrera, por citar algunos, en cualquier momento pueden desnivelar todo cotejo como consecuencia de sus aptitudes"
De todas maneras, este mismo medio resaltaba: "San Francisco siempre fue terreno poco favorable para los de barrio Jardín. Y precisamente Sportivo Belgrano en muchas ocasiones confirmó actuaciones singularmente meritorias".
El partido
Los de nuestra ciudad, saltaron al campo de juego con: Martino; Pecorini, De Santis, Leyes y Astudillo; Rivadero, Ferreyra y Garay; Carreras, Rito Fernández y Chávez.
Tras una primera parte sin emociones pero en la cual Guibaudo comenzó a erigirse como figura, la "verde" pegó fuerte en el complemento, a través de los goles de Eduardo Chávez, a los 7 minutos, y Héctor "Chueco" Garay, a los 22.
La apertura, indicó este medio, llegó a través de un "centro de Fernando Ferreyra, rechazo parcial corto de Arrieta y la pelota que es conectada de zurda por Chávez que se incrusta en un ángulo del atónico Guibaudo".
El segundo tanto, fue una obra de arte. Garay, de mediachilena, hizo explotar barrio Alberione. "En un contragolpe, el marcador de punta Pecorini -de gran actuación- tras quitar una pelota a un rival se 'mandó' por el andarivel del siete. Luego de esquivar a Ocaño, que se largó reciamente a sus pies sin mayor éxito, el defensor 'verde' ensayó un medio centro sobre la ciudadela adversaria. Y, fue, precisamente cuando en esa circunstancia apareció Héctor Garay que tiró de media chilena haciendo penetrar el balón en un ángulo imposible de Guibaudo", describían las páginas de este diario.
En la solidez de José De Santis y otros valores que "rayaron a gran altura", la "verde" elaboró una victoria histórica por el fuste del rival, que vivía su época dorada, y porque, incluso, podría haber goleado.
"El domingo 30 de abril de 1978 pasará a la historia futbolística de Sportivo Belgrano como una de las jornadas de mayor y grata recordación. El sensacional 2 a 0 frente al calificado Talleres -la ventaja pudo ser mayor de no mediar la actuación extraordinaria del arquero Rubén Guibaudo- provocó momentos de euforia para la enfervorizada parcialidad 'verde'", añadía este medio.
El final de la temporada marcó un momento completamente antagónico al vivido esa tarde de abril, es que Sportivo perdería la categoría por única vez en su paso por la Liga Cordobesa. Eso sí, en tan solo un año volvería de manera invicta a la élite del fútbol capitalino.
El 29 de diciembre de 1968, Sportivo Belgrano protagonizó una de las jornadas más importantes de su historia: en una final de novela -en el marco del tercer partido tras dos empates sin goles- la “Verde” venció 3-2 a Belgrano en Córdoba, tras ir perdiendo 2-0, y se coronó campeón oficial de la Liga Cordobesa.
La primera edición de la competencia se disputó en 1969 y Sportivo Belgrano, por ser vigente campeón del Torneo Oficial de la Liga Cordobesa, se ganó el derecho a representar a la provincia en el certamen nacional, que tendría como campeón a Boca Juniors.
El 16 de noviembre de 1986, Sportivo Belgrano vencía en el repechaje a Sarmiento de Leones y sacaba boleto rumbo al Torneo del Interior 1986-87, que por entonces conformaba la tercera división del fútbol argentino con equipos indirectamente afiliados.
Llegó a los dos años a San Francisco, de muy chico se sumó a las inferiores de la “Verde”, debutando a mediados de la década del ’30 en la primera división del club. Fue vendido a Rosario Central y de allí a Peñarol de Uruguay, donde fue ídolo y decidió nacionalizarse. Con la “Celeste”, fue campeón del mundo en el mítico “Maracanazo”, en 1950.
El 28 de octubre de 1956, Sportivo Belgrano vencía como visitante a Instituto -que era su escolta- y se consagraba campeón del Torneo Oficial por primera vez en su historia. Con un trio ofensivo de elite, la “Verde” forjaba una de las páginas más importantes de su vida deportiva.
Notable postal de barrio Alberione y los hinchas de Sportivo Belgrano en 1978. En una jornada épica, la “Verde” le ganaba por la Liga Cordobesa al por entonces actual subcampeón del fútbol argentino: Talleres. La imagen habla a las claras: nunca caminarás solo.
El 18 de octubre de 1959, la "Verde" goleaba como visitante a Instituto, su inmediato perseguidor, y se consagraba campeón del Torneo Oficial de la Liga Cordobesa. Un joven Eladio Rodríguez conducía futbolísticamente a un equipo de alto vuelo.
El 29 de diciembre de 1968, Sportivo Belgrano protagonizó una de las jornadas más importantes de su historia: en una final de novela -en el marco del tercer partido tras dos empates sin goles- la “Verde” venció 3-2 a Belgrano en Córdoba, tras ir perdiendo 2-0, y se coronó campeón oficial de la Liga Cordobesa.
En 1988, con un equipo integrado en su mayoría por jugadores del club y de la región, Sportivo Belgrano se quedó con los dos campeonatos que jugó: el Oficial de la Liga Cordobesa y el Provincial de la Asociación Cordobesa, en el cual dio la vuelta olímpica el 30 de diciembre de ese año.
Hurgando en el archivo de Identidad Verde encontramos estas imágenes del por entonces estadio “Oscar C. Boero” (hoy “Juan Pablo Francia”) en el que queda reflejado cómo lucía la cancha en aquella temporada. El crecimiento fue exponencial.
La primera edición de la competencia se disputó en 1969 y Sportivo Belgrano, por ser vigente campeón del Torneo Oficial de la Liga Cordobesa, se ganó el derecho a representar a la provincia en el certamen nacional, que tendría como campeón a Boca Juniors.
Rodolfo Bissutti en los 40’, Daniel Alberto en los 70’ y Enzo Trossero como estandarte de una época dorada entre los 70’ y 80’, pasaron o surgieron de Sportivo Belgrano y luego brillaron en Independiente de Avellaneda.