
Dueño de destellos futbolísticos que fueron comentario de generaciones y generaciones. Su nombre, no caben dudas, fue de los más importantes que hayan vestido la camiseta de Sportivo Belgrano.
Las divisiones formativas de Sportivo Belgrano iniciaron en este 2023 una histórica participación en los campeonatos de AFA, compitiendo junto a los equipos de la Primera Nacional. En la década del ’20 y ’30, hubo dos escuadras de las menores del club que dieron que hablar y quedaron en el recuerdo: “La Quinta Roja” y la “Cuarta de Fierro”.
Historia - Fútbol25/05/2023A lo largo de sus 109 años de vida, Sportivo Belgrano puede sacar a relucir que hizo de la formación y captación de jugadores, un aspecto central en su política deportiva. Un resumen de ello fue la nota que en 1949 publicó la popular revista El Gráfico, definiendo a la “Verde” como el “Vivero cordobés”.
Históricamente, grandísimos valores surgieron de las divisiones formativas de la escuadra de barrio Alberione, desde Francisco Poletto, César “Checha” Rodríguez y Octavio Biancotti, pasando por Raúl Navarro, Enzo Trossero, Sergio Luna, hasta, más cerca en el tiempo, Juan Pablo Francia, entre tantos otros cracks.
El ingreso de las inferiores de Sportivo Belgrano a AFA supone un nuevo hito en el ámbito de la formación y será, sin lugar a dudas, un salto de jerarquía deportiva y consolidación institucional para los próximos años.
En ese marco, en Identidad Verde fuimos a los archivos y decidimos recordar dos equipos de las formativas del club que dieron que hablar en las décadas del 20’ y 30’ y trascendieron las fronteras del tiempo dado que su periplo fue transmitido de generación en generación.
“La Cuarta de Fierro” y “La Quinta Roja”, dos divisiones que desplegaron un fútbol de un nivel tan alto que quedó grabado entre las historias más importantes del club.
Sus historias serán publicadas durante el fin de semana en nuestra web y replicadas en redes sociales.
Dueño de destellos futbolísticos que fueron comentario de generaciones y generaciones. Su nombre, no caben dudas, fue de los más importantes que hayan vestido la camiseta de Sportivo Belgrano.
Llegó a los dos años a San Francisco, de muy chico se sumó a las inferiores de la “Verde”, debutando a mediados de la década del ’30 en la primera división del club. Fue vendido a Rosario Central y de allí a Peñarol de Uruguay, donde fue ídolo y decidió nacionalizarse. Con la “Celeste”, fue campeón del mundo en el mítico “Maracanazo”, en 1950.
Notable postal de barrio Alberione y los hinchas de Sportivo Belgrano en 1978. En una jornada épica, la “Verde” le ganaba por la Liga Cordobesa al por entonces actual subcampeón del fútbol argentino: Talleres. La imagen habla a las claras: nunca caminarás solo.
En una final digna de novela, la “Verde” igualaba agónicamente con Santamarina de Tandil en la final de vuelta y aprovechando la ventaja deportiva lograba el histórico ascenso al Torneo Nacional B. Cerca de 15.000 almas le dieron un marco inolvidable a la ”Fortaleza” de barrio Alberione.
El 30 de junio, desde el 2013, pasó a ser una fecha patria para el pueblo verde. Aquel día comenzó con una ciudad movilizada como nunca antes, con el color esperanza y banderas flameando por cada rincón, bajo un frío que retorcía pero que de ninguna manera iba a impedir una congregación masiva. Lo demás, es historia.
Un día como hoy pero del 2009, en Mendoza, Sportivo Belgrano escribía una de las páginas más gloriosas de su historia: le volvía a ganar a Gimnasia y lograba el tan ansiado salto de categoría, que se venía postergando.
A lo largo de su historia, en esta fecha tan especial para la Patria argentina, la “Verde” jugó o fue anfitrión de partidos que quedaron perdidos en el tiempo y que, desde Identidad Verde, recordamos.
Fría noche rafaelina, más de 1.000 personas viajaron un jueves a alentar a Sportivo Belgrano que, en rodeo ajeno, le ganó agónicamente 1-0 a Ben Hur con gol del “Tecla” Farías, para el primer triunfo como visitante en el Argentino A. La imagen es una postal de la jornada, delirio verde en aquellas recordadas invasiones con público visitante.
El 30 de junio, desde el 2013, pasó a ser una fecha patria para el pueblo verde. Aquel día comenzó con una ciudad movilizada como nunca antes, con el color esperanza y banderas flameando por cada rincón, bajo un frío que retorcía pero que de ninguna manera iba a impedir una congregación masiva. Lo demás, es historia.
Llegó a los dos años a San Francisco, de muy chico se sumó a las inferiores de la “Verde”, debutando a mediados de la década del ’30 en la primera división del club. Fue vendido a Rosario Central y de allí a Peñarol de Uruguay, donde fue ídolo y decidió nacionalizarse. Con la “Celeste”, fue campeón del mundo en el mítico “Maracanazo”, en 1950.
Dueño de destellos futbolísticos que fueron comentario de generaciones y generaciones. Su nombre, no caben dudas, fue de los más importantes que hayan vestido la camiseta de Sportivo Belgrano.
En una final digna de novela, la “Verde” igualaba agónicamente con Santamarina de Tandil en la final de vuelta y aprovechando la ventaja deportiva lograba el histórico ascenso al Torneo Nacional B. Cerca de 15.000 almas le dieron un marco inolvidable a la ”Fortaleza” de barrio Alberione.
Notable postal de barrio Alberione y los hinchas de Sportivo Belgrano en 1978. En una jornada épica, la “Verde” le ganaba por la Liga Cordobesa al por entonces actual subcampeón del fútbol argentino: Talleres. La imagen habla a las claras: nunca caminarás solo.