
Dueño de destellos futbolísticos que fueron comentario de generaciones y generaciones. Su nombre, no caben dudas, fue de los más importantes que hayan vestido la camiseta de Sportivo Belgrano.
La lista de jugadores que se puso la camiseta de la escuadra de barrio Alberione en torneos oficiales y jugó en una Copa del Mundo reúne a 5 futbolistas y se amplía a 7 si se cuenta el amistoso que Mario Kempes y Osvaldo Ardiles jugaron para la “Verde” en 1972. Un repaso histórico.
Historia - Fútbol30/04/2024A lo largo de su vida, el Club Sportivo Belgrano vio desfilar en sus filas a numerosos cracks, de los cuales algunos inclusive -antes o después de su estadía en San Francisco- jugaron la Copa del Mundo.
El emblemático caso de Ernesto Vidal, surgido de las inferiores de la “Verde” y figura en los últimos años del club en la Federación Regional de Football de San Francisco y en el primero en la Liga Cordobesa, sobresale entre los demás porque fue campeón mundial en la Copa Brasil 1950, con la Selección uruguaya -se había nacionalizado- en el mítico “Maracanazo”.
Además de Vidal, la lista de futbolistas que jugaron en Sportivo Belgrano de manera oficial y una Copa del Mundo tiene a cuatro nombres más: Carmelo “Cholo” Simeone (en Inglaterra 1966), Carlos Vicente Squeo (en Alemania 1974), Enzo Trossero (en España 1982) y Diego Pozo (Sudáfrica 2010).
A esa lista podrían sumarse Mario Alberto Kempes y Osvaldo Ardiles aunque la vez que se calzaron la camiseta verde fue solo para disputar un encuentro amistoso ante Boca, en 1972.
Vidal y Trossero, pegaron el salto desde Sportivo Belgrano y por ello la disputa del Mundial se produjo en la continuidad de sus carreras deportivas. En tanto, Simeone arribó poco menos de dos años después de haber estado en Inglaterra ’66, Squeo seis años más tarde y Pozo cuatro años después.
Dueño de destellos futbolísticos que fueron comentario de generaciones y generaciones. Su nombre, no caben dudas, fue de los más importantes que hayan vestido la camiseta de Sportivo Belgrano.
Llegó a los dos años a San Francisco, de muy chico se sumó a las inferiores de la “Verde”, debutando a mediados de la década del ’30 en la primera división del club. Fue vendido a Rosario Central y de allí a Peñarol de Uruguay, donde fue ídolo y decidió nacionalizarse. Con la “Celeste”, fue campeón del mundo en el mítico “Maracanazo”, en 1950.
Notable postal de barrio Alberione y los hinchas de Sportivo Belgrano en 1978. En una jornada épica, la “Verde” le ganaba por la Liga Cordobesa al por entonces actual subcampeón del fútbol argentino: Talleres. La imagen habla a las claras: nunca caminarás solo.
En una final digna de novela, la “Verde” igualaba agónicamente con Santamarina de Tandil en la final de vuelta y aprovechando la ventaja deportiva lograba el histórico ascenso al Torneo Nacional B. Cerca de 15.000 almas le dieron un marco inolvidable a la ”Fortaleza” de barrio Alberione.
El 30 de junio, desde el 2013, pasó a ser una fecha patria para el pueblo verde. Aquel día comenzó con una ciudad movilizada como nunca antes, con el color esperanza y banderas flameando por cada rincón, bajo un frío que retorcía pero que de ninguna manera iba a impedir una congregación masiva. Lo demás, es historia.
Un día como hoy pero del 2009, en Mendoza, Sportivo Belgrano escribía una de las páginas más gloriosas de su historia: le volvía a ganar a Gimnasia y lograba el tan ansiado salto de categoría, que se venía postergando.
A lo largo de su historia, en esta fecha tan especial para la Patria argentina, la “Verde” jugó o fue anfitrión de partidos que quedaron perdidos en el tiempo y que, desde Identidad Verde, recordamos.
Fría noche rafaelina, más de 1.000 personas viajaron un jueves a alentar a Sportivo Belgrano que, en rodeo ajeno, le ganó agónicamente 1-0 a Ben Hur con gol del “Tecla” Farías, para el primer triunfo como visitante en el Argentino A. La imagen es una postal de la jornada, delirio verde en aquellas recordadas invasiones con público visitante.
El 30 de junio, desde el 2013, pasó a ser una fecha patria para el pueblo verde. Aquel día comenzó con una ciudad movilizada como nunca antes, con el color esperanza y banderas flameando por cada rincón, bajo un frío que retorcía pero que de ninguna manera iba a impedir una congregación masiva. Lo demás, es historia.
Llegó a los dos años a San Francisco, de muy chico se sumó a las inferiores de la “Verde”, debutando a mediados de la década del ’30 en la primera división del club. Fue vendido a Rosario Central y de allí a Peñarol de Uruguay, donde fue ídolo y decidió nacionalizarse. Con la “Celeste”, fue campeón del mundo en el mítico “Maracanazo”, en 1950.
Dueño de destellos futbolísticos que fueron comentario de generaciones y generaciones. Su nombre, no caben dudas, fue de los más importantes que hayan vestido la camiseta de Sportivo Belgrano.
En una final digna de novela, la “Verde” igualaba agónicamente con Santamarina de Tandil en la final de vuelta y aprovechando la ventaja deportiva lograba el histórico ascenso al Torneo Nacional B. Cerca de 15.000 almas le dieron un marco inolvidable a la ”Fortaleza” de barrio Alberione.
Notable postal de barrio Alberione y los hinchas de Sportivo Belgrano en 1978. En una jornada épica, la “Verde” le ganaba por la Liga Cordobesa al por entonces actual subcampeón del fútbol argentino: Talleres. La imagen habla a las claras: nunca caminarás solo.