Gran parte de su vida estuvo vinculada a Sportivo Belgrano. Fueron 40 años al servicio de la entidad de barrio Alberione. En 1953 comenzó a alternar en el rol de utilero, cargo del cual se hizo dueño exclusivo desde 1958 hasta 1989. Dejó un recuerdo imborrable en aquellos con quien compartió vestuario. Una figura clave en la vida institucional del club.
Una medalla de oro para el goleador de la temporada
Abril de 1934, en la antesala de un amistoso interprovincial ante Belgrano de Paraná, el reconocido peluquero e hincha de Sportivo Belgrano, Nicolás Palmisano, entregaba una medalla al club que se llevaría el máximo anotador verde durante el año.
Historias de Identidad12/11/2023Leandro GottardiUna curiosidad era publicada en el diario La Voz de San Justo allá por el mes de abril de 1934, en la previa de un amistoso interprovincial con motivo de los festejos de los 20 años de vida de Sportivo Belgrano: el reconocido peluquero e hincha de la verde, Nicolás Palmisano, donada una medalla de oro para quien fuese el goleador de la escuadra a lo largo de la temporada.
“El conocido hincha local Nicolás Palmisano, propietario de la acreditada peluquería que lleva su nombre, ha tenido la interesante iniciativa de donar una hermosa medalla de oro para el jugador que señale más goales (por entonces aún se utilizaban palabras en inglés) en el curso del presente año”, iniciaba el artículo publicado.
Y se agregaba que: “La simpática actitud de Palmisano ha de ser sin duda muy bien recibida en el ambiente deportivo, especialmente entre los integrantes del equipo privilegiado de los verdes, entre quienes la ambición de la codiciada medalla será como una inyección de energías que los llevará a realizar verdaderas proezas en el verde césped de los fields (palabra que había alusión a las canchas)”.
Por entonces, este tipo de donaciones era común en la ciudad y en diversos puntos del interior del país. Comercios locales ponían en juego copas con su nombre o bien donaban las pelotas o premios de partidos puntuales o en jornadas festivas.
Gustavo Sccoco: anécdotas de una vida junto a la “Verde”
En la segunda parte de la entrevista de Identidad Verde con el reconocido periodista sanfrancisqueño, se recorren diversas historias sobre partidos, jugadores, rivales y viajes por todo el país.
Cristóbal Faust, apodado “Coco”, fue uno de los jóvenes que el 15 de abril de 1914 decidió fundar el Club Belgrano (con el tiempo pasaría a llamarse Club Sportivo Belgrano). A su vez, fue el primer capitán -lo hizo por 10 años- de la historia de la institución. En 1968 relató cómo nació el club y los valores que inspiraron a esos “purretes” que dieron origen al gigante del interior cordobés.
Con el trabajo en conjunto del departamento del hincha, artistas locales y la Municipalidad de San Francisco, se llevaron adelante una serie de intervenciones culturales en las adyacencias del estadio “Juan Pablo Francia”, alusivas a la “Verde” y su identidad.
Gustavo Scocco: “Sportivo es mi vida, siempre fue mi lugar en el mundo”
El reconocido periodista deportivo de San Francisco es uno de lo más fervientes hinchas de la “Verde”. Desde 1971, no dejó nunca de seguir al club de sus amores por el cual sufre y sonríe. Su fanatismo es consecuente con la herencia familiar, puesto que su abuelo fue fundador y su padre un destacadísimo dirigente y colaborador. Anécdotas, recuerdos y más en la primera parte de una imperdible entrevista.
De los ídolos a sus hijos, de sus hijos al emprendimiento familiar
Carnicería “Los Juanes” es el fruto del esfuerzo de la familia Gallo, que meses atrás logró tener su propio local y que trasladó a su nombre una historia de sentido de pertenencia por Sportivo Belgrano. Los hijos de Ariel Gallo y Silvina Pérez son mellizos y se llaman Juan Manuel y Juan Pablo, en honor a los cracks de la “Verde”.
El 16 de noviembre de 1986, Sportivo Belgrano vencía en el repechaje a Sarmiento de Leones y sacaba boleto rumbo al Torneo del Interior 1986-87, que por entonces conformaba la tercera división del fútbol argentino con equipos indirectamente afiliados.
El 29 de diciembre de 1968, Sportivo Belgrano protagonizó una de las jornadas más importantes de su historia: en una final de novela -en el marco del tercer partido tras dos empates sin goles- la “Verde” venció 3-2 a Belgrano en Córdoba, tras ir perdiendo 2-0, y se coronó campeón oficial de la Liga Cordobesa.
En 1988, con un equipo integrado en su mayoría por jugadores del club y de la región, Sportivo Belgrano se quedó con los dos campeonatos que jugó: el Oficial de la Liga Cordobesa y el Provincial de la Asociación Cordobesa, en el cual dio la vuelta olímpica el 30 de diciembre de ese año.
Hurgando en el archivo de Identidad Verde encontramos estas imágenes del por entonces estadio “Oscar C. Boero” (hoy “Juan Pablo Francia”) en el que queda reflejado cómo lucía la cancha en aquella temporada. El crecimiento fue exponencial.
La primera edición de la competencia se disputó en 1969 y Sportivo Belgrano, por ser vigente campeón del Torneo Oficial de la Liga Cordobesa, se ganó el derecho a representar a la provincia en el certamen nacional, que tendría como campeón a Boca Juniors.