
Surgido del “Vivero Cordobés”, Rubén Koroch fue pieza clave de uno de los mejores equipos de la historia de Sportivo Belgrano: fue campeón dos veces en la Liga Cordobesa y conformó un tridente inolvidable junto a Montalbetti y Bracamonte. Estuvo a punto de jugar el Mundial de Suecia 1958 y fue una venta récord en el interior. Además, fue tapa de la famosa revista El Gráfico.