Cada 20 de junio, en la Argentina, se celebra el Día de la Bandera en conmemoración del paso a la inmortalidad de su creador, Manuel Belgrano, quien murió a los 50 años, ese día, de 1820. Su figura, iluminó al grupo de jóvenes que, reunidos en la Plaza Vélez Sársfield, le dio vida a una pasión inexplicable. ¿Qué pasó por aquellos días en San Francisco?
Ante cuatro jugadores de Sportivo, aparecía la “Saeta rubia”
El 7 de julio de 1945, en un amistoso entre River Plate y la Selección de la Liga Cordobesa, Alfredo Di Stéfano, uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol mundial, jugaba su primer partido en primera división. En aquel combinado cordobés, 4 de los 11 jugadores eran de la “Verde”, que días después sería campeón por primera vez en la “Docta”.
Informes especiales 14/01/2024 Leandro GottardiEl debut oficial en primera división de Alfredo Di Stéfano, uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol mundial, ocurrió con la camiseta de River Plate. Una semana antes, en Córdoba, se había ganado la titularidad en un cotejo amistoso. Ocurrió un 7 de julio de 1945 y el rival fue un seleccionado de la Liga Cordobesa. Empataron en uno y la “saeta” anotó el tanto del “millonario”.
Eran años de esplendor de Sportivo Belgrano en la Liga Cordobesa en donde acumulaba cuatro subcampeonatos consecutivos y, once días más tarde, lograría su primer título en el Torneo Preparación. Por ello no extrañaba que la “verde” tuviera una gran cantidad de jugadores en el combinado de la Liga.
El arquero Raúl Tenutta, los zagueros Elvio Paradella y Marino López y el centro half Aldo Gagliardo, eran figuras del elenco de Alberione e integrantes del seleccionado de la Liga Cordobesa.
Aquella memorable tarde los cuatros futbolistas fueron titulares y presenciaron, dentro del campo de juego, el debut de uno de los jugadores más grandes de la historia de esta disciplina, que con los años forjaría una carrera de ensueño brillando en el Real Madrid de España.
Síntesis:
Liga Cordobesa: Raúl Tenutta; Elvio Paradella y Marino López; Antonio Amaya, Aldo Gagliardo y Gualda; Bernardo Barraza, Félix Bianchi, Horacio Bustos, Antonio Yudicello y Antonio Gambino. DT: Rodolfo Bútori.
River Plate: José Soriano; Ricardo Vaghi y Eduardo Rodríguez; Norberto Yácono, Manuel Giúdice y José Ramos; Aristóbulo Deambrossi (reemplazado en el entretiempo por Alfredo Di Stefano), Alberto Gallo, Joaquín Martínez, Adolfo Pedernera y Mario Sabbatella. DT: Carlos Peucelle.
Anteriormente denominado Argentino A, a horas del estreno de la “Verde” en la temporada 2024, repasamos todos los comienzos de campeonato de la escuadra de barrio Alberione. En las 13 ediciones que disputó, solamente 4 veces comenzó jugando en casa.
Juan Manuel Aróstegui se erigió en uno de los máximos goleadores históricos de la historia de Sportivo Belgrano. De su pierna derecha llegó el gol del ascenso al Nacional B, en 2013. Fue referente dentro y fuera de cancha, alcanzando el mote de ídolo total en barrio Alberione.
Leticia Trédici Arias de Paz Casas fue quien diseñó el escudo de Sportivo Belgrano según consta en una carta que su esposo José Tristán Paz le envió a Oscar C. Boero en 1956.
Aquellos doce jóvenes muchachos que el 15 de abril de 1914 reunidos en la Plaza Vélez Sarsfield decidieron fundar un nuevo club no dudaron en la elección del nombre, en honor a Manuel Belgrano. Tampoco de los colores: celeste y blanco. Poco después, se agregaría al nombre el Sportivo y se cambiaría al color verde.
Un 15 de abril de 1914, un grupo de jóvenes soñadores reunidos en la Plaza Vélez Sarsfield, en su afán de crear un club que los identificara y les permitiera practicar el deporte que tanto los apasionaba, fundaron el Club Belgrano que, años más tarde, adoptaría su característico nombre: Club Sportivo Belgrano. La "verde", celebra hoy 110 años de vida.
Llegó a los dos años a San Francisco, de muy chico se sumó a las inferiores de la “Verde”, debutando a mediados de la década del ’30 en la primera división del club. Fue vendido a Rosario Central y de allí a Peñarol de Uruguay, donde fue ídolo y decidió nacionalizarse. Con la “Celeste”, fue campeón del mundo en el mítico “Maracanazo”, en 1950.
Aquellos doce jóvenes muchachos que el 15 de abril de 1914 reunidos en la Plaza Vélez Sarsfield decidieron fundar un nuevo club no dudaron en la elección del nombre, en honor a Manuel Belgrano. Tampoco de los colores: celeste y blanco. Poco después, se agregaría al nombre el Sportivo y se cambiaría al color verde.
Comienzos del 1989, Sportivo Belgrano venía de ser bicampeón en 1988 (ganador de la Liga Cordobesa y el Torneo Provincial) pero la situación económica del club no era la mejor. Por eso se puso en venta un bono contribución bajo el slogan “Pro ayuda año 1989” y con la frase “Ayúdenos a participar”. Nunca pudieron bajar a la “Verde”.
El tanto de Máximo Forlín -en su debut profesional- le dio el triunfo por la mínima a Sportivo Belgrano ante Gimnasia de Concepción del Uruguay. En los últimos años, algo similar ocurrió con Enzo Avaro y Leonardo Felissia. Lo recordamos.